Cada vez que hay un terremoto en el país es inevitable recordar lo sucedido en Valdivia el domingo 22 de mayo de 1960: una liberación de energía que duró aproximadamente 10 minutos y alcanzó una magnitud de 9,5° en la escala de Richter, posicionándose hasta ahora como el más grande de la humanidad. Asimismo el bloqueo del río San Pedro que causó una extensión de volumen en el Lago Riñihue, suceso mejor conocido como el “Riñihuazo”; y tres olas, que según testimonios, sobrepasaron los diez u once metros de alto, afectando principalmente las costas valdivianas.
Por este motivo es necesario estar preparados, ya que generalmente, sobre todo tan cerca del océano, luego de un terremoto viene un tsunami, acontecimiento que la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (ONEMI) define como “una serie de olas largas generadas en el océano que se propagan a gran velocidad en todas sus direcciones desde su punto de origen, originadas por un disturbio sísmico submarino (terremoto, erupción volcánica, caída de meteoritos, etc.) que impulsa y desplaza verticalmente la columna de agua”.
Este tipo de olas pueden llegar a sobrepasar fácilmente los 15 o 30 metros de altura, por ende son capaces de causar un enorme daño en las construcciones aledañas a las costas, acabando con todo tipo de vida urbana y naturaleza existente.
A raíz de esto, es necesario tener planes de emergencia para prevenir eventuales e irreparables desgracias debido a catástrofes naturales, como por ejemplo la muerte de cientos o miles de personas.
En la zona costera de Valdivia existen varios Puntos de Encuentro o Zonas de Seguridad que sirven para salvaguardar a los habitantes de estos lugares. Por esta razón la ONEMI cuenta con un Plan de Protección Civil, cuyo fin es informar sobre las rutas y zonas seguras que se deben transitar en caso de tsunami o maremoto para quienes vivan o visiten Bonifacio, Curiñanco, Los Molinos, Niebla, Pilolcura, San Ignacio, y en general las costas.
Bonifacio es una localidad costera situada a unos 50 km. al noroeste de Valdivia. La amplia biodiversidad marina de esta zona permite un enorme atractivo turístico para quienes deseen practicar el buceo y a su vez sirve para que los pescadores artesanales puedan desarrollar actividades económicas.
En Bonifacio existe una sola vía de evacuación, denominada “Acceso Caleta”, la cual tiene su Punto de Encuentro (PE) al subir por ésta.
Pilolcura, en tanto, es un sector ubicado a 26 km. de Valdivia al que se llega mediante una ruta que bifurca del camino al Parque Oncol. Debido a las constantes visitas de los turistas, esta zona costera cuenta con dos vías de evacuación: el “Camino Vecinal”, camino principal por el cual se accede a la playa de Pilolcura; y “Acceso Caleta”, entrada que se encuentra al sur de la playa.
Curiñanco es una de las zonas costeras valdivianas más visitadas por los veraneantes. Está localizada a 25 km. al noroeste de Valdivia y se puede acceder mediante dos caminos: por el sur a través del pueblo de Niebla y por el sureste a través de Torobayo y Punucapa. Además, en su extremo norte se encuentra el Área Costera Protegida Punta Curiñanco, propiedad del Comité Nacional Pro Defensa de la Flora y Fauna (CODEFF).
El sector de Curiñanco cuenta con varios Puntos de Encuentro y Vías de Evacuación, las que están repartidas a lo largo de toda la playa, esto con el fin de facilitar un eventual abandono del lugar debido a un tsunami o maremoto.
Concerniente a la playa de San Ignacio, este sector posee tres vías: “Acceso Camping Don Lalo”, “Acceso Camping La Cascada” y el acceso principal a la playa; mientras que en Los Molinos son cuatro: en el extremo norte de la playa; “Acceso Escuela”, que tiene como Punto de Encuentro la Escuela Rural Los Molinos; “Camino Vecinal”; y al extremo sur de la playa.
Finalmente, Niebla, sector costero localizado 17 km al suroeste de Valdivia y considerado el balneario más importante de la ciudad, consta con seis Puntos de Encuentro, cada uno con diversos trayectos que pretenden lograr una expedita evacuación para quienes habiten o circulen por esta concurrida zona.
Es necesario mencionar que, tras varios estudios realizados por el Gobierno Regional, el Director Regional de la ONEMI en Los Ríos, Daniel Epprecht, confiesa que “Valdivia no estaría afecto a una ola destructiva en caso de Tsunami, por ende no hay vías de evacuación en la ciudad”.